ORIGEN DEL TEATRO
El teatro nace en las sociedades primitivas, para satisfacer la
necesidad de hombres y mujeres de hacer rituales mágico-religiosos, y
garantizar así el favor de los dioses en la caza y la recolección de los
alimentos.
Desde su origen, fue un arte ligado a los dilemas y valores humanos.
Refleja la tendencia lúdica (de juego) del hombre, que lo lleva transformarse
temporalmente en otra persona, y adoptar su apariencia y lenguaje para
descubrir en sí mismo las respuestas de su condición humana.
La palabra teatro proviene del griego theatron, que significa
"lugar para contemplar".
El teatro, tal y como lo conocemos en la actualidad, surge en la
antigua Grecia. En esta región del mar Mediterráneo se realizan las primeras
representaciones (ritos y ceremonias) en honor a Dionisio, dios del vino.
El teatro es una composición literaria que puede ser representada. Los
diálogos y las acciones de los personajes ubican al espectador en el ambiente,
en su psicología y en el tiempo en que transcurren los acontecimientos.
El arte dramático se clasifica en géneros y subgéneros, lo cual depende
de los temas que aborde. Los géneros más antiguos son la tragedia y la comedia,
surgidos en la Grecia clásica.
La tragedia
Obra dramática cuyo tema central es la crisis que viven un personaje.
Sus características son:
Expresa sentimientos y pasiones intensas.
El desenlace o final suele ser funesto.
El argumento intenta transmitir una lección.
La comedia
Obra cuyo tema central es cualquier hecho humano de la vida cotidiana.
Sus características son:
La historia, por lo general, es intrascendente y no tiene desenlace
funesto.
Su atractivo principal es el movimiento y la viveza de las situaciones.
Hace una crítica de los defectos y/o de las costumbres sociales.
Los subgéneros
La necesidad de representar situaciones humanas que tienen una mezcla
de elementos trágicos y cómicos, ha permitido el nacimiento de los
"subgéneros" teatrales; éstos nacen de los dos grandes géneros antes
mencionados. Entre los subgéneros figura el drama, la tragicomedia, el
melodrama, la farsa, la pantomima, la comedia musical, el teatro guiñol, las
marionetas, la comedia musical, etcétera.
EL TEATRO MODERNO
Con el paso del tiempo y el cambio social, el teatro ha experimentado
también diversas evoluciones, tanto en los aspectos técnicos como en la
temática de las obras. El teatro europeo, por ejemplo, tiene una temática
variada en la que sus autores analizan, por lo general, la psicología de sus
personajes, el subconsciente, la influencia de los sueños.
El teatro moderno se caracteriza por abordar las caras más crudas de la
vida humana, se protesta por las injusticias, por la guerra. Por supuesto que
no pueden hacerse generalizaciones, pues en el caso de España, ahí siguen
presentándose obras costumbristas cuya sátira y crítica va dirigida en contra
de la aristocracia contemporánea. Hispanoamérica, en cambio, sigue las
tendencias del teatro europeo, sólo que los temas se enriquecen con mitos
prehispánicos, leyendas de la tradición oral, con la crítica al racismo, los
sistemas sociales y políticos y con la presentación de personajes, víctimas de
la soledad e incomunicación propias del hombre moderno.
ELEMENTOS DE UN GUIÓN DE TEATRO
El diálogo es el elemento principal de un guión de teatro. El
desarrollo de los guiones de teatro consiste en la conversación entre dos o más
personajes, por medio de los diálogos.
Una obra de teatro se compone de los siguientes elementos:
Acto
El acto es cada una de las partes separadas de la obra teatral: Acto 1,
Acto 2, etcétera.
Cuadro
Parte del acto en que aparece la misma decoración.
Escena
Parte del acto en el que intervienen los mismos personajes.
Acotaciones
Indicaciones que señalan las entradas y salidas de los personajes, sus
actitudes, ademanes y expresiones en general, además de los cambios de
decorado, el lugar donde se realizan las acciones y todas las indicaciones que
sirven para la ambientación y puesta en escena de la obra.
Personajes
Personas o seres que le dan vida a los acontecimientos de la obra. Se
clasifican en:
Principales. Son los más importantes dentro de la obra; si se quitaran,
ésta ya no tendría sentido.
Secundarios. Siguen, en importancia dentro de la obra, a los
principales. Acompañan y secundan a éstos.
Ambientales. Aparecen según las necesidades y circunstancias de la
obra, también se les llama circunstanciales o incidentales.
ESTRUCTURA DE UNA OBRA TEATRAL
La estructura de una obra de teatro se divide en tres momentos básicos:
Planteamiento
Expone un problema y se presentan los personajes. Entera al público de
los antecedentes de la acción.
Nudo
En esta parte se desarrolla la acción, se complica la trama, aparece el
clímax, que es el momento de mayor emoción en la obra.
Desenlace
La acción concluye al resolverse el problema; la resolución puede ser
lamentable o feliz. La manera en que se desenvuelve la acción puede ser natural
y lógica, según las actuaciones de los personajes; rápida e inesperada, para
dejar una mayor impresión en el espectador, o decisiva y completa, abarcando
todo sin dejar cabos sueltos.
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